21 de marzo de 2016

Los Realejos señaliza con paneles informativos en 3 idiomas sus elementos patrimoniales más destacados

La Concejalía de Turismo promueve esta iniciativa para una mejor difusión de los atractivos realejeros y mejorar los servicios al visitante 

El Ayuntamiento de Los Realejos, a través de su Concejalía de Turismo, promueve la dotación de nuevos paneles informativos en tres idiomas en los elementos patrimoniales más destacados del municipio, cuya colocación se irá haciendo de manera gradual en varias fases. Tras la colocación meses atrás del panel correspondiente en el Mirador de El Lance, la pasada semana se hacía lo propio junto a la parroquia matriz del Apóstol Santiago en la plaza Viera y Clavijo de Realejo Alto y la parroquia de Nuestra Señora de La Concepción en Realejo Bajo.

El alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez, resalta que “existe un déficit de señalización e información enfocada al vecino, pero también al turista y en diversos idiomas, con respecto a esos elementos patrimoniales y su significación histórica, así como parajes naturales y elementos arquitectónicos en los diferentes barrios de la localidad, cuestión que se irá resolviendo progresivamente en diferentes años y para lo que en este 2016 contamos con un presupuesto de 6.000 euros”.

Detalla la concejala de Turismo, Carolina Toste, que “el entorno de Realejo Bajo entrará en esta primera fase de dotación de próximos paneles informativos cuyo destino será, entre otros inmuebles del catálogo patrimonial del municipio, la Hacienda de Los Príncipes, la Ermita de San Sebastián, o la Casa de La Parra-Los Lagares”. Recuerda además que “ya la calle de La Pila en Realejo Alto cuenta con otro panel similar en tres idiomas donde se explica la significación de la festividad de Cruces y Fuegos de Mayo y de ese punto concreto que simboliza el intercambio del Santo Madero entre los cargadores de la calle El Sol y los de la calle El Medio”.

Los paneles cuentan también con un código QR que da acceso, a través de dispositivos smartphones, a información más ampliada sobre cada uno de los atractivos, que se encuentra alojada en el sitio web de Turismo, www.losrealejos.travel. A finales del pasado año ya se colocaba un panel en el Mirador de El Lance en Icod el Alto aludiendo a la figura del mítico Mencey Bentor que fue inmortalizado por la escultora Carmen León en 1996 y que preside esta preciada vista sobre la Ladera de Tigaiga hacia el Valle de La Orotava. Además se ha encargado ya para su colocación en las próximas semanas un nuevo panel con las mismas características para el entorno de Los Lavaderos de Tigaiga, un rincón recientemente remozado por el Ayuntamiento de Los Realejos.

Parroquia del Apóstol Santiago

El panel de la parroquia matriz del Apóstol Santiago aporta datos como que las primeras noticias sobre la existencia de este templo se remontan a finales del siglo XV, coincidiendo con los últimos episodios de la conquista de la isla, por lo que es considerado el primer templo cristiano de Tenerife. En el siglo XVII fue objeto de diferentes fases constructivas y en 1774 se levantó la torre a los pies del edificio, construcción que fue completada en el siglo XX con la dotación de un cuerpo adicional a la fachada que incrementó sus dimensiones. Destacan también en este templo importantes manifestaciones artísticas, lo que en su conjunto lo llevó a ser declarado Monumento Histórico Nacional y Bien de Interés Cultural con categoría de Monumento en 1983.

Parroquia de Nuestra Señora de La Concepción

En cuanto a la parroquia de Nuestra Señora de la Concepción en Realejo Bajo, se señala que existen referencias documentales desde la primera década del siglo XVI a una ermita dedicada a Santa María en sitio cercano a las tierras del Adelantado. En los años posteriores, y sobre todo a finales del siglo XVII, se realizaron diversas ampliaciones arquitectónicas que determinaron un templo de tres naves con sendas capillas en su cabecera, más otras dos en el costado sur. La torre fue construida a comienzos del siglo XX en el frontis del edificio. En 1978 un incendio asoló con todo el patrimonio mueble conservado durante siglos. En 1993 se abre nuevamente al culto, conservando la estructura anterior, sobre todo sus cuatro interesantes portadas de los siglos XVI y XVII. De su patrimonio destacan piezas escultóricas, pictóricas y de orfebrería. Fue declarada Bien de Interés Cultural, con categoría de Monumento, en 2003.


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