El acuerdo garantiza unos cuatro repartos de comida al año entre familias necesitadas en los que el Ayuntamiento sólo asume el coste del transporte.
El Ayuntamiento de Los Realejos se ha adherido al convenio entre el Banco de Alimentos de Tenerife (Bancoteide) y la Federación Canaria de Municipios (FECAM) para hacer extensiva la labor de distribución de comida de esta entidad entre las familias más necesitadas del municipio. El principal compromiso por parte del consistorio consiste en hacerse cargo del transporte desde la sede de Bancoteide en Santa Cruz de Tenerife hasta un local de Los Realejos donde se realizará cada reparto, previéndose unos cuatro al año.
Será el área de Bienestar Social de Los Realejos, que dirige la concejala Noelia González, a través de sus trabajadores sociales, la que efectúe una valoración técnica de las familias susceptibles de recibir los alimentos y bajo qué criterios fijar la distribución de los mismos. Debe integrarse además en ese informe social el detalle de los productos aportados con indicación de su puesta a disposición, cantidades, tipos y marcas.
Además, el Ayuntamiento realejero debe poner a disposición los efectivos humanos necesarios para hacer la distribución dentro del municipio, “aunque se van a abrir líneas de contacto con diversos colectivos y ONG con el objetivo de que de manera voluntaria se obtenga también esta ayuda”, apunta la concejala de Bienestar Social, Noelia González, “pues estamos hablando de una necesidad social que requiere que todos arrimemos el hombro”, agrega.
Con la adhesión a esta iniciativa, el Ayuntamiento de Los Realejos se convierte en uno de los primeros de la provincia en servirse del acuerdo entre Bancoteide y FECAM, firmado hace apenas un mes. “No podíamos desaprovechar una oportunidad como ésta para seguir tratando de contribuir en la aminoración de los efectos de la crisis económica que está dejando en situación de riesgo de exclusión social a tantas familias de las islas, algo que lamentablemente no es ajeno al municipio”, señala el alcalde realejero, Manuel Domínguez.
Los alimentos que se reparten son básicamente arroz, cereales infantiles, tomate frito, galletas, harina, pasta alimenticia, cacao soluble, crema de verduras deshidratada, caldo de carne, leche, queso fundido, queso mezcla curado, leche de continuación en polvo, natillas y bebida pasteurizada de frutas y leche, entre otros.
La iniciativa se enmarca en el Plan de Ayuda Alimentaria, encuadrado en las medidas de regulación del mercado de productos agroalimentarios de la Política Agraria Común, con el que desde la Unión Europea se pretende poner a dispoción de las personas necesitadas y de manera gratuita alimentos básicos de calidad y emplear así los excedentes de ciertos productos agrarios en poder de los organismos públicos de intervención.
A nivel estatal es el Fondo Español de Garantía Agraria del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino el responsable de la ejecución del Plan de ayuda Alimentaria. En todo el país se estima que serán más de 133 millones de kilos de alimentos los que se repartan durante 2011, por valor de más de 70 millones de euros. Son entonces los bancos de alimentos españoles, como en el caso que nos ocupa el de Tenerife, o Cruz Roja Española, quienes recepcionan los alimentos para luego hacer la distribución a través de líneas de colaboración con otras entidades o administraciones, en esta ocasión con los ayuntamientos de las islas.
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